De Bécquer: “ Del salón en ángulo oscuro, tal vez olvidada de su dueño, silenciosa y cubierta del polvo, veíase el arpa”. Con éste blog ocurre similar. Cuando las musas de Ceuta vomitan inspiración por mi entorno, ocurre que, a veces, soy capaz de plagiar. Con cuidado, claro, de que no me pillen copiando ideas. Porque uno también escribe al dictado. ¡Qué se habían creído ustedes que tal método era exclusivo de los del símbolo del Hacho! El alcalde de turno nunca tuvo oportunidad de pagar, con los impuestos de los ceutíes, la opinión controlada de justo lo conveniente. Sencillamente, no entraba dentro de mis principios periodísticos de servicio a la comunidad ceutí. Con el rollete de la desinformación, los alcaldes de turno, son creadores, padres, de unos determinados flamantes y respetados nuevos ricos. Se lo han montado bien con la sopa de letras y ondas. Siempre en línea con la onda.
Así pues, cuando toca ese momento mágico de copiar, tengo que apresurarme para no perder el hilo de las ideas. Son tantas las que llegan, que me hierve la cabeza como olla a presión. Con lo que, en el desarrollo agolpado, precipitado, sin tener ya oportunidad de apremios de cierre de edición alguna, de tantos detalles, muchos de ellos, se escapan a la hora de desarrollar los comentarios. Hablo de las reinas tránsfugas, y escribo que fueron 2. Lapsus calami. No hay 2 sin 3. Como en el cuento: una se fue a pasear por la medina con un presi; una se la benefició (en otro sentido, a otra moza que terminó por romperle el corazón en cruz roja) otro presi; una le ofreció bocadillos a otro presi .
3 reinas trásfugas que se fueron de rositas, sin que por tales cambiosinteresados de situación, en el mapa político, es un decir, se hubiera examinado con lupa, con una investigación en profundidad, las circunstancias. ¿Se siguió cobrando como miembro del gobierno, cuando se estaba en oposición? ¿Cifras de 20 y 70 millones de pesetas? ¿Dinero negro?
A tenor de los casos de corrupción en nuestro país, se ha demostrado que toda pesquisa policial, termina por dar sus frutos. Detectando el destino final de ese dinero negro. Está claro, que ni ese tipo de dinero se esfuma. Por mucho incienso que quemara un santo varón y sus 30. 000 euros (5 millones de las posibles/futuras pesetas). Pueblo pequeño. Casi todos nos conocemos. Casi todo se llega por saber. Ahora bien, si falta la voluntad de entrar en el fondo de los asuntos, la patente de corso, se impone, por encima de otras consideraciones.
Puestos a refrescar votos tránsfugas. A la última reina, la acompañaron 2 reyes. Formaron el trío ”Los tránsfugas”. Considerados como integrantes de la banda de Ali Baba, merced al chaqueteo, pasaron a convertirse en caballeros de la tabla redonda, para honor y gloria. La fijación enfermiza, patológica, obsesiva, por acaparar el poder, hizo que aquellos que se desgañitaban criticando, los convirtieran en una especie de salvadores de la patria. Aquellos a los que se les criticaba, abiertamente, por activa y pasiva, de ser protagonistas de la corrupción, como único argumento válido, para servir al pueblo de Ceuta, pasaron, se convirtieron, sin tener que pasar previamente por el infierno, en compañeros extraños del viaje por el mundo del interés. De los particulares, por supuesto. Se llamen personales, o partidistas.
Seré neardental, pero mi memoria histórica, aunque atrofiada por la falta de evolución, y mi condición de perro con pulgas, sigue recordándome que, uno de los motivos que han hecho de la democracia un fiasco, es la falta de principios, de dignidad. Es la ética y estética de la moneda antigua. Y punto. Final. ¿De la peseta o del euro?